2007-06-06

Ellos son así. ¡¡Nosotros NO!!

Tras la nueva tregua trampa, cuyos objetivos consistían, principalmente, en la vuelta a las instituciones para conseguir cientos de millones de euros con los que financiarse, así como en lograr presencia política institucional, y, secundariamente, en el rearme y la reorganización, así como, en tercer lugar, tener un presencia constante y activa en las calles, el trabajo realizado por el gobierno de ZP y sus colaboradores es desolador. A la vista de los resultados que el “Proceso de Paz” ha generado después de un año y pico de tregua y algunos más de negociación oculta y traidora, el éxito de la ETA ha sido rotundo. Y no decimos que total por concederle al gobierno que al menos no todas las listas de ANV, afines y de ASB están en las instituciones. Eso hubiera supuesto una mayor influencia y medios para seguir asesinando y luchando por sus objetivos separatistas. Encima acabaremos agradeciéndoselo. Al tiempo, que ya nos convencerán.
Un éxito que además hay que poner también en el plano estético. Efectivamente, el espectáculo del Poder Judicial ha sido repulsivo, empezando por la purga de Fungairiño y terminando con el asunto de ANV u Otegui. El asesino De Juana paseando por la calle, lo del monte monte Aritxulegi con unos terroristas armados y uniformados pegando tiros con total impunidad, la T4 de barajas, las constantes declaraciones y ruedas de prensa de los terroristas, han sido los elementos de una batalla estética, difundida por los medios y vencida también por los etarras. Claro que enfrente tenían a los partidos españoles enfrentados por la conquista del poder, incapaces de luchar en común por los intereses de la nación que juraron defender, atentos sólo a sus propios intereses. Un espectáculo de vergüenza.
¿Y la pobre España? Acogotada, pero no vencida, por las concesiones del gobierno a los separatistas, a unos y a otros, que vislumbró la posibilidad de hacerse con el poder perpetuo si se hacía con la paz. La pobre España casi desgajada, casi moribunda.

El momento perfecto, pues, para (re)generar un espíritu de conquista, de milicia, de ilusión por avanzar contra los enemigos, que como vemos son muchos y bien dispuestos. Su fuerza no nos hará abandonar la esperanza y la fe por conocer una España como la de los mejores tiempos, unida por aquellos objetivos eternos que siempre tuvo a bien defender. Marchamos, sí, con alegría hacia las fronteras, a defender una vez más los ideales por los que lucharon nuestros héroes. Son momentos de alegría. España es posible.

Adelante muchachos, reunidos,
tras la furia y la lanza del Cid,
triunfaremos por nuestra grandeza;
que la raza prosigue sin fin.

1 comentario:

Gabriel María dijo...

"El Estado liberal no cree en nada, ni siquiera en sí propio. Asiste con los brazos cruzados a todo género de experimentos, incluso a los encaminados a la destrucción del Estado mismo. Le basta con que todo se desarrolle según ciertos trámites parlamentarios. (...) Un Estado para el que nada es verdad sólo erige en absoluta, indiscutible verdad, esa posición de duda. Hace dogma del antidogma. De ahí que los liberales estén dispuestos a dejarse matar por sostener que ninguna idea vale la pena de que los hombres se maten.

(...) Para encender un fe, no de derecha (que en el fondo aspira a conservarlo todo, incluso lo injusto), ni de izquierda (que en el fondo aspira a destruirlo todo, hasta lo bueno), sino una fe colectiva, integradora, nacional, ha nacido el fascismo. En su fe reside su fecundidad, contra la que nada podrán las persecuciones". (JAP, Orientaciones hacia un nuevo Estado).